Magdalena: tipo de pastelillo o bizcocho....mmmmm
Guillermina no sabía hasta qué punto se le iba a complicar la existencia la mañana que encontró envuelto entre sus sábanas a un perfecto desconocido. La noche previa al hallazgo, su show en el pub no había sido lo más logrado en los anales del humor, y por ello debió de pensar que el destino le estaba gastando una broma pesada. Estaba preparada para todo menos para la llegada del “Increíble Hombre Magdalena”, ese con el que quieres perder el tiempo desayunando y no volver a echarlo de tu cama jamás de los jamases.
Elloras