Libro 8 (Final)
Puede que me conozcas como Meredith Nic Essus, princesa del reino de las Hadas. O, quizá, como Merry Gentry, detective privado de Los Ángeles. Tanto en el reino de las Hadas como en el mundo de los mortales, mi vida es objeto de intrigas reales y dramas célebres. Entre los míos, me he enfrentado a terribles enemigos, soportado la traición y maldad de mi especie y cumplido con el deber de engendrar un heredero… todo por el derecho de reclamar el trono. Pero le he dado la espada a la corte y la corona, eligiendo exiliarme en el mundo de los humanos… y en brazos de mis amados Frost y Darkness.
Puede que yo haya rechazado la monarquía, pero no puedo abandonar a mi gente. Alguien está matando hadas, lo que tiene desconcertado al Departamento de Policía de Los Ángeles y profundamente trastornados a mis guardias y a mí. Los de mi especie no son fáciles de matar y capturar… al menos no por los mortales. He de llegar al fondo de este espantoso asunto, aunque eso signifique enfrentarse a Gilda, el Hada Madrina, mi rival por la lealtad de las hadas de la ciudad de Los Ángeles.
Pero suceden las cosas más extrañas. Mortales que a los que una vez sané con magia de pronto obran milagros, un impactante fenómeno que siembra el caos en las relaciones entre humanos y hadas. Aunque yo soy inocente, soy sospechosa de realizar actividades mágicas prohibidas.
Creía que había dejado atrás la sangre y la política en mi turbulento reino. He soñado con llevar una vida idílica en la soleada ciudad de Los Ángeles con mis amados a mi lado. Pero ha llegado el momento de despertar y darme cuenta de que el mal no tiene fronteras y que nadie vive para siempre… ni siquiera si son mágicos.
Traducido por el Tribunal de las Hadas
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